China, Brasil… ¿o algún otro más? Brasil intenta salir de su crisis política y económica, y China no crece a las tasas que solía hacerlo. Más allá de la necesidad de buscar nuevos acuerdos de libre comercio y diversificar nuestros clientes, la buena noticia es que Brasil está mejor que a principios de año y China, si bien no crece a las tasas de la década pasada, ha duplicado su producto y modificado su dieta de manera tal que la demanda de soja y alimentos más sofisticados se mantiene. Resulta clave empezar a reemplazar dólares financieros por dólares comerciales, en particular porque si la economía vuelve a crecer, las importaciones crecen a razón de 3 a 1 con cada punto porcentual de crecimiento.