Si bien el saldo del Balance Comercial sigue siendo negativo, los últimos datos muestran el efecto “colesterol bueno”, indicando que dicho desbalance surge de un incremento de las importaciones pero también de un aumento de las exportaciones. A su vez, las mayores exportaciones responden a una mejora de las manufacturas de origen industrial, en particular a Brasil, y que dentro de las mayores importaciones predominan las importaciones de bienes de capital y bienes de consumo durables. En la medida que esta tendencia se mantenga es probable que este año presente una mejor perfomance comercial externa que en los años anteriores.